Prepárate para la temporada de fiebre del heno con Neutrient Total C

Millones de personas sufren la fiebre del heno cada año, pero los nuevos y sorprendentes suplementos como Neutrient Total C pueden ofrecer una esperanza nueva para los que padecen de estornudos.

Según el centro de meteorología del Reino Unido, hay tres estaciones principales de polen, por lo que si sufres la fiebre del heno más o menos el mismo mes cada año puedes estimar fácilmente a qué tipo de polen está reaccionando tu cuerpo.

• La temporada del polen de los árboles tiende a darse desde finales de marzo hasta mediados de mayo. Los pólenes típicos de los árboles a los que las personas reaccionan son los siguientes: avellano, tejo, aliso, olmo, sauce, álamo, abedul, fresno, plátano, roble, lima y pino.
• La temporada del polen de las hierbas tiende a darse de mediados de mayo a julio y todas las gramíneas pertenecen a la familia de las poáceas. El 95 % de los que sufren la fiebre del heno son alérgicos al polen de la hierba.
• La temporada del polen de las malezas tiende a darse a finales de junio a septiembre y las malezas habituales que desencadenan la fiebre del heno incluyen la acedera, la artemisa, la ortiga, la colza y el plátano.

La conexión con la histamina

La histamina se almacena en mastocitos altamente especializados que se encuentran en los tejidos mucosos de las vías respiratorias. Los mastocitos protegen contra los patógenos invasores y cuando se activan liberan grandes cantidades de histamina para alertar al cuerpo de que una sustancia potencialmente peligrosa está penetrando en el organismo. La fiebre del heno es una reacción alérgica típica que tiene lugar cuando se detectan niveles de polen gracias a los mastocitos que recubren las vías respiratorias.

La liberación de histamina atrae células inmunes especiales a las vías respiratorias, que actúan para destruir el polen y eliminar la mayor parte del polen del cuerpo lo más rápido posible. La mucosidad se utiliza para eliminar el polen de los ojos y la nariz y los estornudos se provocan para expulsar el polen de los pulmones. La histamina también desencadena inflamación e hinchazón que sirve para contener el polen y evitar que llegue a otras áreas del cuerpo. Esto provoca enrojecimiento, dolor e incluso dolores de cabeza.

Apoyo al sistema inmune

La vitamina C tiene una gran reputación por ofrecer protección durante la temporada de la fiebre del heno, y esto probablemente se deba a su contribución a la función normal del sistema inmunitario y a su capacidad para proteger las células del estrés oxidativo. Las propiedades antioxidantes de la vitamina C son las que ayudan a proteger las células inmunes contra los radicales libres que se generan durante una respuesta inflamatoria alérgica.

Aunque la histamina es una molécula mensajera crítica para la curación, el exceso de histamina puede tener un impacto negativo en el equilibrio inmunológico y puede agravar afecciones como la fiebre del heno.

Picazón en los ojos, dolor de garganta, flujo nasal y estornudos son signos de que hay una respuesta inflamatoria en curso, lo que indica que la temporada de fiebre del heno puede haber comenzado para ti: es la histamina la que desencadena estas reacciones alérgicas al polen.
Sin embargo, algunos nutrientes como la vitamina B6 y la vitamina C actúan como cofactores enzimáticos de una sustancia llamada diamina oxidasa (DAO), que ayuda a descomponer el exceso de histamina y, como tal, pueden ofrecer un valioso apoyo nutricional junto con una dieta antihistamínica durante la temporada de la fiebre del heno.

Nutrición las 24 horas

Cuando se trata de seleccionar un buen producto de vitamina C para tu kit contra la fiebre del heno, asegúrate de elegir una forma de vitamina C que puedas tomar fácilmente durante todo el día. Neutrient Total C es una combinación de ascorbatos minerales tamponados con una forma de vitamina C liposoluble llamada palmitato de ascorbilo. Estos minerales son benignos con el estómago y no suelen provocar la típica descarga intestinal asociada a la toma de altas dosis de ácido ascórbico (vitamina C normal).

Quercetina y bioperina

Neutrient Total C también contiene otros nutrientes útiles como la D-ribosa, DHQuercetina y un extracto de pimienta negra llamado bioperina. La DHQuercetina es un flavonoide que se encuentra en gran proporción en frutas y verduras que complementa la acción de la vitamina C, y la bioperina es un extracto de pimienta negra patentado que ayuda con la absorción de la vitamina C.

Seis consejos para hacer más llevadera la temporada de fiebre del heno

1. Utilizar una barrera

Es prácticamente imposible filtrar el polen del aire que respiras, pero no es imposible reducir la cantidad de polen que entra en las vías respiratorias.
Hay muchas cremas de barrera natural de cera de abejas que se pueden usar dentro de las fosas nasales y que capturan el polen que entra en la nariz, evitando que entre en contacto con las células. Muchos afectados opinan que esta es una buena forma de reducir los síntomas.

2. Miel dulce

Una antigua tradición para combatir la fiebre del heno es incluir en la dieta miel producida localmente. Esto ayuda al cuerpo a desarrollar una defensa natural contra el polen al que estás expuesto en tu región.

3. Reducir el alcohol

El vino, el alcohol y la cerveza empeoran los síntomas de la fiebre del heno, y esto se debe a que todas estas bebidas alcohólicas también contienen histamina, la sustancia química que desencadena de forma natural la reacción alérgica al polen.

4. Centrarse en el omega 3

Según una investigación publicada en el European Journal of Clinical Nutrition, una dieta rica en grasas omega 3 disminuye el riesgo de fiebre del heno. Por ello es importante que incluyas pescado azul, nueces, semillas de lino y semillas de chía en tu dieta diaria para aumentar la cantidad de omega 3 en la temporada de la fiebre del heno.

5. Relájate

También conviene recordar que el estrés puede aumentar la sensibilidad del organismo, lo que significa que niveles más bajos de polen que normalmente se toleran empiezan de repente a desencadenar síntomas. Otros contaminantes del aire, como los gases producidos por el tráfico, también pueden irritar los conductos nasales, lo que le facilita las cosas a la fiebre del heno.

6. Vigilar los productos lácteos

Los alimentos como los productos lácteos estimulan el cuerpo a producir más mucosidad, lo que puede aumentar la gravedad de la reacción alérgica.

Prepárate para esta temporada de fiebre del heno, de manera que puedas comenzar a controlar los síntomas y estar recuperado en verano.

Susie Debice (licenciada con honores en ION)
Experta en alimentación y terapeuta nutricional

BIBLIOGRAFÍA

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• Janeway, C.A. Jr, Travers, P., Walport, M. y otros. Immunobiology: The Immune System in Health and Disease. Quinta edición. New York: Garland Science; 2001. Effector mechanisms in allergic reactions.